lunes, 28 de agosto de 2017

Bajonazo veraniego con un punto navideño

El pasado Sábado no nos venció un gran equipo. No pasó por Pontevedra un rival superior que nos aventaje en presupuesto ni cuente con más medios para afrontar la temporada que nosotros.
Nos ganó un conjunto que alineó de delantero a un jugador desechado por la entidad granate y otros dos hombres de refresco igualmente descartados no hace demasiado por la comisión deportiva pontevedresa ante la necesidad de dotar de mayor nivel al colectivo.

Sí nos derrotó, por contra, un equipo de fútbol ordenado que intentó no cometer demasiados errores graves y que supo leer el deficiente sistema defensivo local especialmente en la primera parte para hacer toda la sangre posible además de aprovechar las insoportables negligencias defensivas en el balón parado del Pontevedra CF.
Por tanto, el Sábado se llevó los puntos de nuestro Estadio un equipo humilde y bien trabajado pero al que el Pontevedra debería ganar nueve de cada diez partidos en Pasarón y con cierta comodidad.

Pero si eso no fue así, si el Pontevedra sucumbió ante el Bouzas, no fue por otra razón que el lamentable partido disputado por los nuestros que concedió como ya ocurrió en Vigo hace ocho días los regalos necesarios para salir con la cabeza gacha del Estadio Municipal de Pasarón.

No es este un artículo en el que se vaya a argumentar que todo está perdido y que la posibilidad de acceder otra temporada a los puestos de privilegio se haya esfumado para siempre. 
Sería absurdo en el mes de Agosto sacar lecturas tan exageradas cuando el guión de casi toda la temporada 17/18 está por escribirse.
Pero sí es un escrito en el que se hablará de los tremendos errores cometidos tanto en el plano colectivo como en el individual así como de algunas notas (pocas, eso sí) positivas que dejó el partido.
Vamos a empezar por esos detalles alentadores para que aquellos que no quieran sumergirse en el océano de fallos cometidos el Sábado puedan dejar de leer estas líneas un poco antes.
Y es que como puntos esperanzadores cara el futuro desde el punto de vista individual el encuentro dejó la impronta de un Prosi letal a la hora de golpear la pelota y que dio una exhibición magistral en cinco minutos de como se debe acometer el golpeo del esférico.
Primero en una falta en la que con el exterior del pie y en una parábola imposible estrelló el balón en el larguero de la portería viguesa; luego en un corner que envió cerrado para estampar la pelota en una de las crucetas de la portería y finalmente recogiendo un rechace defensivo en las inmediaciones de la frontal del área para conectar un zurdazo que casi derriba otra vez el larguero del arco visitante.
En esos cinco minutos de "ciclón Prosi", el asturiano enseñó su principal virtud futbolística que no es otra que dominar como los ángeles el golpeo del cuero con todas las posibilidades que eso acarrea para el equipo cada vez que alguna falta deba lanzarse en las proximidades del área rival.

Al margen de la actuación del medio asturiano que salió al partido tras el descanso, dejó igualmente buen sabor de boca en los pocos minutos que disputó el gallego Marcos Alvarez. El ex boirense demostró chispa y velocidad por banda derecha que le pueden venir realmente bien al equipo a lo largo de la competición.

Me gustaría reseñar más detalles interesantes del partido pero realmente no existieron.

Lo que sí existió fue un atolondramiento general y colectivo a la hora de defender sobre todo en la primera parte.
Con ese sistema 3-4-1-2, el equipo se partía constantemente y resultaba muy preocupante observar cada vez que se perdía la pelota como los tres centrales reculaban y el resto del equipo tardaba en bajar con lo que un espacio enorme se abría en nuestro propio campo para que los jugadores rivales campasen a sus anchas.    
Además, el Bouzas fue inteligente y ocupó en muchas ocasiones los agujeros evidentes que se abrían en la defensa granate en ambas bandas pues a ellas no llegaban los centrales y nunca aparecían los "carrileros".
Ya en la primera parte, además, cada vez que un corner o una falta lateral se lanzaba sobre nuestra portería la sensación de inseguridad era palpable y de ahí llegó el 0-1 en una jugada preñada de despejes penosos que propiciaron que un atacante contrario se quedara delante del Edu para fusilarlo a placer.

Tuvimos suerte y sin solución de continuidad apareció el penalti que nos dio el empate y a renglón seguido Etxániz tuvo el segundo en una ocasión clara que desaprovechó pero lo cierto es que el partido se encaminó hacia el descanso sin que el Pontevedra consiguiera tomar el control del choque en ningún momento y dando sensación de vulnerabilidad y desconcierto.
Es muy importante destacar que los jugadores destacados o por lo menos que mantuvieron algo el tipo en esa primera parte no fueron otros que Alex Fernández, Mouriño, Añón o Kevin, es decir, los del año pasado con la particularidad de que algunos de ellos eran hace poco suplentes o muy suplentes.
De los nuevos llamó la atención la pésima primera parte de Carlos Ramos que no apareció en momento alguno y el desastre de los carileros Castro y Miguel siendo más preocupante la actuación del segundo pues es el único lateral derecho de la plantilla. 

Con el cambio de dibujo tras el descanso (4-1-4-1, con Kevin de ancla en el medio y Alex Fernández y Prosi por delante junto a Mouriño en la izquierda y Añón en la derecha) es verdad que el equipo pareció sufrir algo menos en defensa (al margen del balón parado que acabó condenándonos) pero no fuimos capaces de dotar al juego de la continuidad necesaria para desarbolar la resistencia planteada por el Bouzas.
Sólo en esos cinco minutos de Prosi ya citados y en una ocasión maravillosa de Alex González que había salido al campo sustituyendo a Mouriño se dio sensación de peligro y bien se habría incluso podido ganar de haber convertido alguno de esos lanzamientos.
Despúes, Luisito sacó a Marcos Alvarez (que ya se ha dicho dejó detalles) por Bruno pero eso motivo que Kevin pasara al centro de la defensa y Prosi ocupara una posición más retrasada con lo que el foco de más peligro creado por el Pontevedra, los tiros de Prosi, se acabó por extinguir por completo.

Pero he aquí que el partido todavía tenía guardada la sorpresa final, esa que hace que enarbolar los colores granates siga siendo un orgullo pero también una oda a la paciencia infinita.
Corner en el minuto 80 a favor del Bouzas y un central (el más alto del rival) aparece de manera incomprensible y lamentable solo en el primer palo sin nadie que le moleste ni un poquito para marcar el 1-2 y machacar de raíz la renovada ilusión granate. 

De ahí al final solo hubo impotencia, nervios e incapacidad para siquiera volver a nivelar un choque que terminó por escaparse de manera lastimosa y frustrante.

Como ya se ha escrito, que da toda la Liga por delante y nada, absolutamente nada, está perdido pero la imagen ofrecida el Sábado dista mucho de la que esperábamos no por manifestar el equipo defectos en la conjunción de los jugadores pues es verdad que ha llegado mucha gente nueva sino por la "empanada" intolerable en defensa y la incapacidad mostrada para controlar minimamente el partido.

Aquellos que argumenten que había bajas importantes tienen razón. Faltaban algunos hombres y por lo menos tres de ellos han venido aquí a jugar muchos minutos ( por lo visto el otro día la baja de Jimmy es dramática y la ausencia de un lateral derecho alternativo también) pero ni eso puede servir de excusa para la comisión de errores de tal calibre que cuestan puntos muy valiosos que jamás retornarán al petate granate.

Llega la Copa en solo dos días y luego otro derby liguero en Cerceda.

Haría bien el equipo en concienciarse en que lo primero que se necesita es cerrar la bolsa de regalos de los Reyes Magos para a partir de ahí crecerse y salir hacia arriba a otras latitudes clasificatorias más acordes con lo que se nos ha vendido.
Y estaría bien que lo hicieran pronto. Antes de que esos nervios que se atisbaron el Sábado se multipliquen exponencialmente y alcanzar la superficie resulte mucho más complicado.
  


2 comentarios:

  1. Para bajonazo el que ha pegado la plantilla, a ver si se trae algo en los días que quedan para cerrar el mercado, porque la humillación de este sábado fue enorme

    Y el atraco con las entradas y las camisetas del aniversario a 90 € también daría para rato, Lupe se debe creer que está presidiendo al Real Madrid, que siga así y ya verá como Pasarón tendrá este año más 2000 que 3000 personas

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  2. Eliminados con contundencia en copa y seguimos de bajonazo.
    Luisito seguro que sigue teniendo explicaciones para todo, pero lo cierto es que no creamos juego ofensivo y defensivamente estamos muy verdes, ni recien ascendidos dábamos tanta pena.

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