lunes, 10 de octubre de 2016

De actos conmemorativos, sentimientos granates y algún chino que otro.

Pues ya está aquí. "La semana grande" del 75 aniversario del Pontevedra CF. empieza hoy con la apertura de la exposición sobre la historia del club que permanecerá en la Diputación Provincial hasta el día de Reyes de 2017.

Serán siete días preñados de actividades relacionadas directa o indirectamente con la entidad granate que tendrán su culminación en el partido que se disputará frente al Lealtad el próximo Domingo coincidiendo con la fecha exacta en la que hace ya tres cuartas partes de siglo nació esa aventura maravillosa llamada Pontevedra CF. (permítanme, por favor,  la licencia de no añadir las tres malditas letras que acompañan la denominación del club desde hace más o menos una década).

De la organización de los actos se ha encargado una comisión designada por el Consejo de Administración presidida por el periodista Xabier Fortes.

Cuando un grupo de personas como la que forman dicha comisión realizan esta labor de forma altruista y sacando tiempo de sus ocupaciones habituales y siendo además el Presidente de dicha comisión una persona de cuyo sentimiento granate e identificación con este sentimiento está más que probada (pues ha dado y a buen seguro que seguirá dando constantes muestras de llevar a gala su pontevedresismo allá por donde se encuentre) y teniendo en cuenta además que el presupuesto con el que habrán podido contar para organizar el programa a buen seguro que ha tenido que ser ínfimo, lo primero que habría que hacer es felicitarles por haber sacado adelante los actos conmemorativos y contribuir a que este homenaje a nuestro equipo alcance la máxima difusión posible ya no dentro de los límites de la ciudad del Lérez y su comarca sino incluso en el resto de este país tan contradictorio llamado España.

Ahora bien, agradecer y reconocer el trabajo de la comisión no impide que este atribulado bloguero una vez examinada la relación de actos existentes en el guión haya experimentado una sensación de decepción e incluso mezclada con un punto de desilusión al comprobar que una vez más los abonados y otrora socios de la entidad hayan vuelto a quedarse un poco al margen del pensamiento del club.

Nuestro rival el Domingo será el Lealtad de Villaviciosa. El nombre del equipo asturiano viene al pelo para tratar de explicar el porqué de mi pequeña decepción.
A lo largo de toda esta semana (y ya desde hace tiempo lo estamos haciendo) escucharemos y leeremos puntos de vista diferentes acerca de lo que significa el Pontevedra para mucha gente. Pero ¿y si fuera el propio Pontevedra CF quien por arte de magia pudiera corporeizarse durante un par de horas y adquiriese igualmente la capacidad de hablar? ¿A quien agradecería el club por haber contribuido a mantenerle con vida y propagar sus bondades a lo largo de tantos años? 

Estoy seguro (porque de producirse ese hecho de prestidigitación inaudita las palabras del Pontevedra CF desbordarían justicia y ecuanimidad) que daría las gracias a todos los ex jugadores y técnicos que han trabajado para la entidad desde el primer día. Como no podía ser de otra manera felicitaría a aquellos directivos que con mayor o menor acierto pero con buena fe han regido el destino del club en diferentes momentos históricos algunos de los cuales debieron atravesar verdaderas tormentas que a punto estuvieron de llevar al fondo del mar a la nave, agradecería a todas las personas que en otras facetas han prestado su servicio a la entidad granate y aportado su granito de arena para que el motor nunca se parase. Agradecería muchísimo a todos los aficionados granates que en alguna ocasión ( aunque sólo fuera una) se dejaron en sus gradas los gritos de apoyo a los colores de su equipo.

Ahora bien, creo que otro de los agradecimientos más emotivos y profundos del Pontevedra CF si pudiera expresar siquiera durante un momento todo lo que siente sería para los LEALES. Esas personas que han sido socias desde el comienzo de manera ininterrumpida y a aquellas otras cuya fidelidad alcanza ya más de medio siglo y que nunca se han bajado del carro y han seguido contribuyendo modestamente con su carné a que las patas de este inmenso mecanismo llamado Pontevedra CF nunca se parasen.

Conozco socios que llevan mostrando su adhesión a la entidad desde hace más de cincuenta años. Socios que han visto al equipo codearse con Real Madrid y Barcelona pero que no se han largado con viento fresco a otras hierbas más fértiles ni cuando el Pontevedra hacía el ridículo hace tan poco  tiempo frente al Sanxenxo, al Estradense o al Silva.

Nadie les ha obligado, es cierto. Es más, acudir los Domingos al césped sigue siendo una felicidad para ellos y ven más que compensado el puñado de euros, antes pesetas, que dejan en las oficinas de la entidad a principio de cada temporada.

Pero a pesar de la voluntariedad de su gesto, me falta en esta conmemoración un reconocimiento especial a estos veteranos impenitentes que seguirán acudiendo a Pasarón hasta que las fuerzas literalmente se lo impidan.

No pido que se les bañe en oro y plata (faltaría más) pero ¿ni siquiera existía la posibilidad de unas insignias modestas o cualquier otra mención o humilde regalo que hiciera un poco de justicia a estas decenas de aficionados leales?.

Son detalles, nimios si quieren, pero detalles que lo único que harían sería engrandecer todavía más la historia de este gran club que no debe olvidar (y ya van muchas veces que se le intenta recordar) a la gente que más le quiere y a la que habría que cuidar con más esmero.    



Necesitaba, en mi opinión, esta ciudad de savia nueva periodística y uno de los nombres que se han incorporado recientemente al gremio y que además de saber de fútbol conoce cada vez más los entresijos del funcionamiento de la casa granate, Xurxo Gómez, se apuntaba un buen tanto al publicar en exclusiva para El Faro de Vigo una entrevista con la Presidenta del Consejo de Administración del Pontevedra.

A pesar de que en dicha entrevista se tocaron (y por parte de Murillo se contestaron) cuestiones más que interesantes, el punto que más atención ha tenido para la opinión pública es la presunta oferta de un grupo inversor chino para hacerse con la propiedad del Pontevedra.

Precísamente ahora que parece que la compra del R.C.Celta por un holding de empresas de ese país parece muy cercana levantando una buena polvareda entre buena parte de la afición celeste, sale ahora a la luz esta oferta de la que no se sabe más que su nacionalidad.

Han salido ya muchas voces alertando del peligro que supondría para el club verse en manos extranjeras y muchas de esas opiniones han salido de esas "fuerzas vivas" de la ciudad que no han pisado el campo de Pasarón más que en aquellas ocasiones que la concurrida actividad de "figurar" haya exigido tal presencia.

Sobre esta noticia he de decir que a pesar de no saber que grupo inversor ha formulado la oferta, si hubo montante fijo de la misma, cuando se hizo la propuesta y más datos sobre el particular no tengo porque poner en duda la veracidad de la noticia anunciada por Lupe Murillo.

Ahora bien, a algunas voces alejadas (insisto) del mundo del fútbol que han puesto el grito en el cielo por la posibilidad de que el club pase a manos de intereses no gallegos habría que decirles que sin duda este bloguero prefiere que la propiedad del Pontevedra CF siga perteneciendo a gente pontevedresa o gallega pero siempre y cuando la gestión económica y social de la entidad sea correcta y no desastrosa pues este equipo ha estado a punto de desaparecer tres veces y ningún chino mandarín estaba sentado en la poltrona haciendo girar sus anillos de oro con uno de sus dedos mientras con otro adecentaba su delgado bigotillo ensayando una siniestra sonrisa cual protagonista de la famosa película 55 días en Pekín, film en el cual varios occidentales escapaban por los pelos de los terribles boxer refugiándose como podían en sus diferentes embajadas.

Abundando en este argumento económico, la parte que a mi más me llamó la atención de esta buena entrevista es aquella en la que Murillo repetía otra vez  (ya lo hizo en otras ocasiones) que el único lujo que no nos podíamos permitir es colocar al Pontevedra una vez más al borde de la muerte y que los éxitos deportivos son posibles pero sin sacrificar de manera suicida los argumentos dinerarios con los que pueda contar en cada momento nuestro club.

El cumplimiento de esta premisa es vital. Yo ya le escuché el mismo argumento a Nino Mirón y la cosa acabó como acabó. 
Espero y deseo que en esta ocasión se cumplan estas buenas intenciones y se pueda lograr la mejora deportiva a la que sin duda puede aspirar el Pontevedra (volver a la LFP) con la mesura y tranquilidad suficiente como para hacerlo sin hipotecar nuestro futuro y contándole la verdad a la masa social.

Esto y no otra cosa es lo importante. Más allá de chinos, árabes o demás familia, la clave es dirigir el barco con equilibrio y con la velocidad adecuada siempre con el objetivo bien marcado.

Si es así bienvenidos sean por siempre los pontevedreses o gallegos al timón, si no lo es dará igual que sean nacidos en la calle Michelena o en el barrio más profundo de Shangai.


PD: 

No se pudo ganar en Burgos pero al menos se sacó un punto. Las crónicas dicen que se falló demasiado a la hora de definir.
Como estamos en semana de cumpleaños voy a quedarme con el vaso medio lleno y decir frases algo manidas como esa de que "cuando no puedas ganar por lo menos no pierdas". Sí es verdad que es el primer desplazamiento sin encajar goles y que este punto se haría mejor si somos capaces de vencer al Lealtad y dar lustre al 75 aniversario de este gran equipo que se llama Pontevedra CF.  


   

    

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